lunes, 27 de junio de 2016
lunes, 20 de junio de 2016
Rafael contigo, la razón histórica mediante, nunca más
La
década de la Revolución ciudadana está por concluir y con ella el poder centralizado
en Alianza PAIS, desde el que se impuso consensos forzados para la modernización
capitalista, que, además, se la ejecutó en clave conservadora. En esto el
proyecto de la revolución ciudadana no se diferencia de la tradición gubernamental
que ha caracterizado la historia política de este país.
lunes, 13 de junio de 2016
El caudillismo en la década de la Revolución
Ciudadana
Lamentablemente, y se justifica utilizar este juicio de valor, el
caudillismo es parte indiscutible de la historia política de América latina y específicamente
del Ecuador. Si algo caracteriza la vida política en el subcontinente es el
recurso caudillista de sus gobiernos, el mismo que subsiste a lo largo de la
historia adecuándose a cada época.
La última cara del caudillismo en el continente bien se la podría denominar
caudillismo progresista. Esta reciente versión caudillista, al mismo tiempo que
está preñada de sus fundamentales tipos se adecua a los tiempos actuales y se caracteriza
por lo siguiente:
lunes, 6 de junio de 2016
La resistencia es un derecho y sobre todo una exigencia histórica
La tradición de los oprimidos nos enseña que la regla es el «estado de
excepción» en el que vivimos. Hemos de llegar a un concepto de la historia que
le corresponda. Tendremos entonces en mientes como cometido nuestro provocar el
verdadero estado de excepción; con lo cual mejorará nuestra posición en la
lucha contra el fascismo. No en último término consiste la fortuna de éste en
que sus enemigos salen a su encuentro, en nombre del progreso, como al de una
norma histórica. No es en absoluto filosófico el asombro acerca de que las cosas
que estamos viviendo sean «todavía» posibles en el siglo veinte. No está al
comienzo de ningún conocimiento, a no ser de éste: que la representación de
historia de la que procede no se mantiene. (Walter Benjamín)
Como era de suponer y esperar, con el gobierno de Alianza PAIS caracterizado
por su política antipopular, los jueces correístas sentenciaron a cuatro años
de cárcel a la compañera Luisa Lozano y al compañero Amable
Angamarca, de la comunidad Saraguro, con la malintencionada acusación de “generar
disturbios y agredir a policías” en el contexto de las luchas de resistencia
que tuvieron lugar el año pasado, en rechazo a la política del mal gobierno.
La humanidad ha
tejido sus historias de humanización a través de sus luchas de resistencia en
contra de toda forma de dominación y opresión que ella misma, en sus grupos inhumanos,
ha provocado. La historia humana es de
tal modo la tensión permanente entre aquello que busca someterla y la aquella
voluntad que busca la emancipación.
Así, la historia de
los pueblos, de lo que hoy es el Ecuador y América Latina, es la historia de
las luchas de resistencia en contra de la dominación colonial, patriarcal y
capitalista. Desde el momento en que los conquistadores europeos impusieron el
sistema colonial en los territorios del Abya Ayala, los pueblos ancestrales, y
luego junto a ellos los pueblos históricos que habitan en el continente, han
resistido la dominación del sistema colonial y neo colonial que violentamente se
impuso y se impone por los distintos malos gobiernos que se turnan como
funcionarios de la opresión.
La resistencia a la
dominación colonial y a sus serviles funcionarios de turno ha estructurado
nuestra percepción del mundo, nuestro pensamiento, nuestra sensibilidad,
nuestros valores y nuestras prácticas cotidianas, es decir nuestras comunidades
de vida. Sin lugar a equívoco, en ella se funda la identidad cultural de
nuestros pueblos, ella es definitivamente el sustrato de nuestra vida común y de nuestra promesa de futuro y emancipación.
Los actuales pueblos
de América latina, y particularmente los
del Ecuador, son hijos y herederos de las luchas de resistencia que se desplegaron a lo largo de la historia del
continente. Como diría W. Benjamín: “Existe una cita secreta entre las generaciones que fueron y la
nuestra. Y como a cada generación que vivió antes que nosotros, nos ha sido
dada una flaca fuerza mesiánica sobre la que el pasado exige derechos. No se
debe despachar esta exigencia a la ligera. Algo sabe de ello el materialismo
histórico.”
Es la razón
histórica y humana la que legitima las luchas de resistencia, no un grupo de
esclavos de la inhumana dominación. Y es esa misma razón histórica y humana la
que condena las injusticias de los
dominadores actuales, que como sus antepasados coloniales persiguen, enjuician,
condenan y encarcelan a los hijos e hijas de los pueblos ancestrales que en su
resistencia afirman la humanidad que los dominadores quieren negar.
La ilegítima
sentencia judicial que el mal gobierno correísta ha impuesto a los hermanos en
resistencia es históricamente ilegítima, por su carácter patriarcal, racista y capitalista, pues dirige su violenta opresión
al rostro de la mujer indígena, campesina y empobrecida.
Con la autoridad de
la razón histórica que asiste a los pueblos oprimidos, no admitimos las injusticias
del poder. Nosotros y nosotras pueblos en resistencia no aceptamos de ninguna
manera la criminalización de nuestras luchas de resistencia, menos aún las ilegítimas
condenas a nuestros hermanos y hermanas de Saraguro y a todos los que se
encuentran procesados por la injusticia correísta.
¡¡¡Libertad para los compañeros de Saraguro !!!
¡¡¡Libertad para los compañeros de Saraguro !!!
Suscribirse a:
Entradas (Atom)